Hacia rutas salvajes

HACIA RUTAS SALVAJES

Sinopsis

Christopher McCandless es un niño bien al que la vida le ha tratado mal. El desequilibro familiar provocaba peleas entre sus padres. Los únicos dos apoyos que McCandless podía tener, eran su hermana y los libros. Entonces, después de graduarse con todo sobresalientes, y con todo el dinero preparado para Harvard, decide huir de casa y buscarse a sí mismo en lo salvaje. Realizará muchos viajes en los que conocerá a muchísimas personas, a las que tendrá como si fuesen de su familia, porque la única familia que tuvo, fue su hermana. Ese viaje no es solo por fuera, sino un viaje introspectivo en el alma de este buen muchacho.

Mensajes de la película

Al comienzo de la película apareces unos versos de el famoso escritor romántico Lord Byron, que reza así: “Hay placer en los bosques sin caminos, Hay éxtasis en las orillas solitarias, Hay compañía donde nadie pisa, Cerca del profundo mar y de su rugido musical; No amo menos al hombre, sino más a la Naturaleza”. Con esta poesía comienza la película. Estos versos son un ejemplo más de la frase latina: “Beatus ille”. En esa huida; sale de su burbuja de dinero, estudios en Harvard, de toda la hipocresía del entorno, Christopher McCandless se presentará a las personas como Alexander Supertramp. Esto es un cambio externo que también se está llevando a cabo en su interior. Como dice él:“Después de dos años de vagabundeo, llega la gran aventura final. La batalla culminante para matar lo falso y concluir la revolución espiritual”. También se puede añadir que no hace falta ver la película para captar ese espíritu salvaje. Con leer a Gonzalo de Berceo, a Fray Luis de León e incluso a San Juan de la Cruz, de ellos puedes extraer esas ganas.

El ansiar la libertad es algo que está en el alma de todo ser humano. Toda alma desea salir de su jaula de hipocresía urbanita, y llegar a la Naturaleza en su estado completo, la verdadera libertad. Abrir las puertas de la percepción, y ver el universo tal como es: infinito(William Blake). Como decía Hemingway de cuando estaba en París: “Eramos muy pobres, pero muy felices”. O su famosa frase: “No es más rico quien mas tiene sino quien menos necesita”. Ese deseo de libertad es como cuando tienes unas vestiduras de las que quieres deshacerte, entonces llega el momento de rasgárnoslas y mostrarnos en el más puro estado de la verdad. Ser verdaderos; olvidarse de la hipocresía, dejar las convenciones sociales, dejarse llevar, ser tú mismo. Volver a las entrañas de nuestra existencia, recuperar la pureza que hemos perdido por el camino. El anonadamiento: la reducción a la nada, sin dinero, sin temor. Tú y el universo.

ALEXANDER SUPERTRAMP O CHRISTOPHER McCANDLESS

Tras ver esta película todas las personas desearían ser como él. Una buena persona que nunca hiere a nadie. Alexander ha tenido una infancia dura, pero sigue adelante y continúa siendo buena persona. No se deja influir por su entorno. Tiene demasiada personalidad como para permitirlo. Está harto de la hipocresía, de las ataduras a la vida mundana. Pero a Christopher se le olvidó una cosa que el mismo diría en sus últimas: “La felicidad solo es felicidad cuando es compartida”.

PABLO ESTEBAN KEOGH